“Con la excusa de combatir la inmigración clandestina, los gobiernos están adoptando políticas represivas y expanden cada vez más las fronteras de las naciones enriquecidas mediante centros de detención, desalojos, expulsiones, y selección de la mano de obra.” (extracto del Llamamiento
sobre migración del Foro Social Mundial Policéntrico de Bamako/Mali en enero de 2006)
Los regímenes fronterizos europeos convierten a l*s migrantes en ‘ilegales’. Una de las principales medidas que adoptan las autoridades de la Unión Europea contra los movimientos y luchas de l*s migrantes consiste
actualmene en el establecimiento de campos y otros instrumentos de control migratorio fuera de la propia Europa, en países del Este de Europa y de África (“externalización de la fronteras”).
Cuando miles de migrantes y refugiad*s asaltaron colectivamente las vallas fronterizas de los enclaves españoles de Ceuta y Melilla en septiembre y octubre de 2005, las cruciales demandas de libertad de movimiento e
igualdad de derechos fueron presentadas ante la atención pública, al menos durante ese momento. Las reacciones inhumanas y bárbaras, los disparos mortales y las deportaciones masivas al desierto, reflejaron el nivel
ascendiente del conflicto y la crisis del régimen migratorio europeo.
Pero está en marcha un proceso que aspira a socavar dicho régimen, no sólo del otro lado de la frontera, sino también de este, desde dentro. En cada rincón de Europa, casi a diario, se producen luchas, protestas y campañas
políticas y sociales contra los campos de detención y las deportaciones y reclamando el derecho de asilo para hombres y mujeres, la regularización, los derechos de ciudadanía europea basados en la residencia en lugar de en
la nacionalidad y contra la explotación del trabajo migrante. Estas luchas superan con mucho cualquier estrecha concepción de la identidad europea.
Nuestro nuevo llamamiento conjunto a un Día de Acción retoma las movilizaciones del 31 de enero de 2004 y del 2 de abril de 2005, cuando celebramos el primer y segundo día de acción sobre migración en más de 50 ciudades europeas. En el Foro Social Europeo de Atenas de mayo de 2006, a la cuestión migratoria se consagró por primera vez un “eje” temático específico. Una creciente red de iniciativas en torno a la migración decidió en la asamblea final dar un paso más y coordinar acciones por toda Europa para el 7 de octubre de 2006.
Tomando en consideración las condiciones regionales y nacionales específicas y las circunstancias de las diversas luchas, nuestro Día de Acción apela a la resistencia en los ámbitos europeo y transcontinental.
Nuestra movilización significará la primera escala para desarrollar la propuesta de una manifestación conjunta en 2007, en Bruselas o en otro lugar de interés público. Con ello pretendemos plantear apelar al conjunto de Europa y no sólo a los gobiernos nacionales.
Junto a ello, la fecha escogida quiere ser un recordatorio de los eventos de Ceuta y Melilla en 2005. Haremos un esfuerzo importante para construir cooperación con iniciativas de África. Un día simultáneo de acciones en
ciudades europeas y africanas en octubre puede ayudar a promover un eje sobre migración en el próximo Foro Social Mundial, que tendrá lugar en Nairobi (Kenia) en Enero de 2007. Ello corresponde con el Llamamiento citada de Bamako Call: “En el periodo entre el Foro de Bamako y el de
Nairobi, proponemos una movilización internacional durante todo el año en defensa deñ derecho de todas las persoans a circular libremente por el mundo y para determinar su propio destino … Finalmente convocamos a un día internacional de movilización que podría desarrollarse en los lugares/símbolos de las fronteras (aeropuertos, centros de detención, embajadas, etc.)”.
Sobre todo, estamos determiandos a acentuar la dimensión global de las luchas migrantes de hoy. De este modo, pretendemos conectar nuestro Día de Acción con las iniciativas y movilizaciones masivas en marcha del
movimientos de migrantes americano en un futuro próximo.
Este Tercer Día de Acción se dirigirá contra la negación de derechos, la criminalización de los migrantes y todos los controles migratorios, articulando demandas claras en el marco de la libertad de movimiento y el derecho al establecimiento:
– Por una regularización incondicional a escala europea y la consecución de igualdad de derechos para tod*s l*s migrantes.
– Por el cierre de todos los centros de detención en Europa y en todo el mundo.
– Por el cese de todas las deportaciones y del proceso de externalización de las fronteras.
– Por la separación entre los permisos de residencia y los contratos de trabajo y contra la “precariedad”.
